
La autenticidad en las Sendas antiguas, se entiende como estar en el sentir adecuado, correcto. Otra manera de expresarlo sería “tener la marca de Dios”, la cual queda especificada de esta manera: “Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien en humildad, estimándoos inferiores los unos a los otros” (Filip 2:3)
Ser auténtico es reconocer, mediante la realizacion, que sin el Señor Jesús, nada podemos hacer (Juan 15:5). Eso es estar alineados con nuestro primer amor (Apoc 2:4)
Es en ese sentir genuino, que se rompe la maldicion en nuestras vidas, y Dios derrama bendicion sobre nosotros.
- Bendiciones.